miércoles, 26 de enero de 2011

Ruidos de fuego

Como alguien que huele, entretenido, margaritas en septiembre, estuve metiendo las narices en el pasado. Entré a sueños repetidos que tenían que ver con mis fulgores y con mis argumentos, y ahí cansé mis pasos y sacié mis añoranzas. Estuve contando el alfabeto de mis viajes, descuartizando mis escamas, solucionando mi andar de ciego. Lavé algunos recuerdos que sangraban a carcajadas, quemé las cartas escritas a la mujer de pómulos hundidos. Suspendí una deuda pendiente con una constelación de estrellas asfixiantes. Terminé cansado sintiendo lijas en la memoria de tantos recuerdos agitados. ¿Has caído en el Edén donde hay vidrios rotos que reflejan tus placeres? ¿Te has internado tanto entre la espesura de los sueños que has volado con sigilo al lado de mariposas blancas, escuchando sus aleteos de fuego?

No hay comentarios:

Publicar un comentario