domingo, 4 de diciembre de 2011

Desandar los pasos

Los caminos abren sus piernas de forma inesperada. ¿Hacía dónde dirigirse cuando ya se ha avanzado tanto? ¿Te has decidido a desandar lo ya andado, a dar vuelta a la derecha cuando siempre has perseguido algo diferente, a dirigirte por lo más sinuoso o estrecho? Caminar es lo importante. Dirigirse a algún sitio suponiendo llegar a la mejor posada, o al más cálido destino. Aquí lo vital es continuar la avanzada. Ir a la vanguardia de los propios pasos. No dejar de mirar el horizonte aunque se vea lejos. Lo trascendente es no detener la marcha. Es siempre tener un mapa para seleccionar un nuevo destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario